Proyecto E.D.S.C.E.!
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Proyecto E.D.S.C.E.!
Desconocido para muchos es que día a día, o a veces de día por medio, verdaderos héroes luchan por su propio bienestar (¿Acaso iban a hacerlo por el nuestro, tuyo o mío?). Estos héroes tan poco conocidos luchan en pro de la investigación y el desarrollo de la ciencia, por el derecho inherente a todo científico de hacer pruebas letales en humanos, y sobre todo, por que sí.
A continuación, el inicio de la saga que dió a conocer al ilustre Dr. Weissmann a una cantidad de personas relativamente despreciable:
Física con ignorancia, propiedades trágicas.
“Un hombre sin religión es como un pez sin bicicleta”
Si bien se sabe que la física es la ciencia exacta que estudia la materia y su energía, no sabemos decir con precisión cuándo y cómo es que esta se manifiesta ante nuestros ojos, ni conocemos tampoco su amplio campo de estudio. Así pues, con el fin de añadir palabras a la cuenta, voy a realizar una breve reseña histórica: primero (384 a.C.) no se sabía mucho de nada (O no se sabía nada), hoy día (2005 d.C.), se sabe más que antes (Acerca de la física, por supuesto).
Ya con esta reseña histórica breve pero concisa, proseguiremos el dichoso escrito. Para hacer un pequeño análisis recopilatorio de los sucesos relacionados con la física que puedan acontecer en un día, se usará el formato de la historia trillada, del tipo “usted se levanta a equis hora, hace tal y tal cosa…”
Análisis ante meridiem, y por consiguiente, post mortem: Supongamos que usted será denominado “Sujeto A” (En lugar de el verdadero “Sujeto A”, quien se encuentra acá conmigo y es el verdadero sujeto de estudio) y se levanta a una hora equis en la mañana, pero no toma en cuenta que al levantarse está partiendo del reposo, y que esta acción implica una fuerza (Que se mide en julios, o en newton, no sé), ni tampoco se acuerda que está desafiando a la fuerza de gravedad al osar erguirse glorioso (Pero añejo) sobre sus pies.
La siguiente manifestación física, por decirlo así, se da a la hora del bostezo matinal (O flatulencia mañanera, dependiendo de lo que haya cenado), donde la acústica entra en acción, la acústica es una rama de la física, por si no se sabe, que estudia el sonido y lo que implica. Es entonces como mediante una complicada ecuación un físico puede averiguarle hasta lo que comió en la cena con sólo analizar el sonido (O estruendo) producido por el bostezo o flatulencia mañaneros. Luego, al dar los primeros pasos de la mañana sucede uno de los hechos más influyentes sobre lo que será del día, pues es en esos primeros pasos en los que hay un aproximado de 47.6% de probabilidad de pegar el dedo chiquito de su pie (No importa si derecho o izquierdo) contra la pata de la cama o cualquier otro borde afilado presente, y si esto sucediese se aplica una ley física, que yo no sé si existe, pero consiste en lo siguiente:
Sopapo (S) = Masa (m) x Velocidad (v). Así pues:
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Haciendo caso omiso del dolor, los alaridos y los insultos que desencadena el sopapo, tenemos una fórmula para averiguar la magnitud de S, usando como datos el peso aproximado de su pierna y la velocidad probable del pie a la hora de chocar con la pata de la cama: Dado el hecho de que el pie está pegado a la pierna, y que esta actúa como una palanca (Yo qué sé de qué género) que proyecta en forma de movimiento la energía química del cuerpo, y que la pierna a su vez es dirigida por el cerebro (El cerebro del homo sapiens sapiens es muy superior a los del resto de especies existentes) a través de nervios que llevan impulsos eléctricos con precisión, no debería haber entonces razón alguna para el choque, pero como este se da, ni modo… Si la pierna tiene de masa unos ocho kilogramos, y esta impulsa al pie cual kamikaze a una velocidad sorprendente (A esa hora de la mañana) de 3.6 m/s, podemos averiguar la magnitud de S multiplicando ambas cantidades entre sí, entonces se supone, porque yo no estoy seguro, que obtendremos como resultado una magnitud medida en newton, si no es que era en julios…
Para el resultado: S = 28,8 N (Sino entonces era n, o J, o tal vez en j). En fin, ¡que sopapo! Después de la recuperación usted va al baño, donde entre otras cosas, usted se baña. En el baño es donde sin querer uno comprende el verdadero valor de la fricción, pues a la hora de agarrar el jabón, este siempre tiende a saltar de nuestras manos debido sus propiedades. También es en el baño donde se llega a comprender el valor de recoger inmediatamente el jabón a la hora en que este cae al piso: un resbalón es fulminante (Recuerde que S= m x v). También se dan manifestaciones relacionadas con las de las leyes de los fluidos y la hidrostática, pero como de esto no sé nada no se mencionará.
Conforme avanza el día suceden otras cosas como las relacionadas con la gravedad terrestre: la cuita de pájaro que le cayó en la cabeza, la lluvia que lo agarró sin paraguas, etcétera. También suceden cosas relacionadas con inercia, como cuando en una avenida el conductor que viene pasándose el semáforo en rojo pisa el freno, pero sigue derecho hasta arrancarle el parachoques frontal y parte de la carrocería lateral izquierda a su auto, o cuando en un apuro usted lanza algo sobre la mesa en un ángulo de cuarenta y cinco grados hacia abajo según su línea de visión y este algo no se detiene si no es hasta caer al piso (Se recomienda no lanzar nada frágil por esta razón). Entre otras situaciones físicas, las relacionadas con la presión atmosférica son de las más desesperantes, por ejemplo cuando se viaja en automóvil desde una parte alta a una más baja, y debido a la presión usted siente que se le tapan los oídos, y es en ese momento en el que hace un número de muecas directamente proporcional al número de años de su bisabuela multiplicados entre tres para terminar con la sensación desagradable de los oídos tapados. Por supuesto nadie habla de estas cosas.
No quería mencionar el tema del calor porque tampoco sé nada de este tema, pero como es parte de la investigación, no se puede dejar de lado. Como no sé nada del calor ni de termodinámica, solo sé decir que el nivel de calor que se sienta es proporcional a la cantidad de veces que se diga le frase “tengo calor”.
Y por desgracia el estudio termina aquí, porque a “Sujeto A” lo atropelló un camión mientras cruzaba la calle para encontrar más información acerca de la física atómica, astronómica y cuántica. La magnitud de S fue tal que “sujeto A” se dispersó uniformemente por la autopista en un rango de treinta y siete metros a la redonda, esto sin contar los varios kilogramos de materia humana que se impregnaron en el camión, en los vehículos cercanos y en los transeúntes que estaban tirando ojo. Fatal manifestación de la física.
Luego se supo que “Sujeto A” venía resolviendo este problema mientras cruzaba la autopista y por eso no vio, ni oyó el camión que venía: Si un anciano, digno del mejor geriátrico, escupe una flema multicolor formando un ángulo con la horizontal de 3 x pi x radio del cilindro cónico de un sorbete de helado estándar, calcular el tiempo en segundos que tarda el viejo de la par en tirarle un zapato por cochino. Si el gargajo posee forma de prisma y lo atraviesa un rayo de luz blanca, calcular la dispersión monocromática de la frecuencia del color azul-papaya. Si el vejete es diabético, calcular la circunferencia del moretón dejado por el zapatazo, sabiendo que el otro viejo es osteoporótico y no ha desayunado, y que los huevos están a ¢950 el kilo.
Entre las cosas que se lograron descubrir con la importante ayuda del difunto “Sujeto A” se encuentra un postulado de una ley ya descubierta anteriormente que plantea la trayectoria probable de las partículas sólidas o semisólidas que viajan libres por el aire y que oscilan en tamaño los 0.5 mm. Esta dice lo siguiente: “Una partícula que se desplace buscará inmediatamente el ojo más cercano”. “Sujeto A” descubrió también ciertas leyes de termodinámica gatuna, pero se supo que en la confusión del accidente estas fueron robadas por un indigente de la zona y posteriormente utilizadas como papel higiénico por este, y otros seis indigentes más, por lo que las notas fueron irrecuperables.
No es por alarmar a nadie ni nada, pero sabemos quién fue el indigente que robó los apuntes tan preciados… ¡Prepárate, cabrón!
Conclusiones del análisis a.m., y por consiguiente p.m.: El estudio de la física y sus propiedades conlleva peligros que se manifiestan en el momento en que más daños pueden ocasionar (Referirse a S= m x v). Debido a lo anterior nos han atropellado al “Sujeto A”, y además personas inocentes se han visto muy afectadas de una u otra forma.
Es por eso que no debemos detener nuestros mortales pero beneficiosos estudios de las ciencias exactas, pues de lo contrario todos estos sacrificios humanos habrán sido en vano.
Dedicatoria a “Sujeto A”:
Hermano anónimo de sangre mestiza,
no pongas atención a la gente
que pretende de ti hacer risa,
y disfruta el viaje al reino celeste.
Desinteresado colaborador,
en nuestra mente vivirá.
La gente dirá en tu memoria
que, aún en tu invierno, nunca desististe.
Ahora, “Sujeto A”, ve hacia la gloria;
¡Vete “Sujeto A”, que nadie más te mencionará!
Gracias infinitas, “Sujeto A”.
Y así acaba el primer informe del afamado Dr. Weissmann. Aún falta mucho por venir, así que esperad pacientes las próximas entregas de los Ensayos Didácticos Sobre Ciencias Exactas, E.D.S.C.E.
CHAO PS
A continuación, el inicio de la saga que dió a conocer al ilustre Dr. Weissmann a una cantidad de personas relativamente despreciable:
Física con ignorancia, propiedades trágicas.
“Un hombre sin religión es como un pez sin bicicleta”
Si bien se sabe que la física es la ciencia exacta que estudia la materia y su energía, no sabemos decir con precisión cuándo y cómo es que esta se manifiesta ante nuestros ojos, ni conocemos tampoco su amplio campo de estudio. Así pues, con el fin de añadir palabras a la cuenta, voy a realizar una breve reseña histórica: primero (384 a.C.) no se sabía mucho de nada (O no se sabía nada), hoy día (2005 d.C.), se sabe más que antes (Acerca de la física, por supuesto).
Ya con esta reseña histórica breve pero concisa, proseguiremos el dichoso escrito. Para hacer un pequeño análisis recopilatorio de los sucesos relacionados con la física que puedan acontecer en un día, se usará el formato de la historia trillada, del tipo “usted se levanta a equis hora, hace tal y tal cosa…”
Análisis ante meridiem, y por consiguiente, post mortem: Supongamos que usted será denominado “Sujeto A” (En lugar de el verdadero “Sujeto A”, quien se encuentra acá conmigo y es el verdadero sujeto de estudio) y se levanta a una hora equis en la mañana, pero no toma en cuenta que al levantarse está partiendo del reposo, y que esta acción implica una fuerza (Que se mide en julios, o en newton, no sé), ni tampoco se acuerda que está desafiando a la fuerza de gravedad al osar erguirse glorioso (Pero añejo) sobre sus pies.
La siguiente manifestación física, por decirlo así, se da a la hora del bostezo matinal (O flatulencia mañanera, dependiendo de lo que haya cenado), donde la acústica entra en acción, la acústica es una rama de la física, por si no se sabe, que estudia el sonido y lo que implica. Es entonces como mediante una complicada ecuación un físico puede averiguarle hasta lo que comió en la cena con sólo analizar el sonido (O estruendo) producido por el bostezo o flatulencia mañaneros. Luego, al dar los primeros pasos de la mañana sucede uno de los hechos más influyentes sobre lo que será del día, pues es en esos primeros pasos en los que hay un aproximado de 47.6% de probabilidad de pegar el dedo chiquito de su pie (No importa si derecho o izquierdo) contra la pata de la cama o cualquier otro borde afilado presente, y si esto sucediese se aplica una ley física, que yo no sé si existe, pero consiste en lo siguiente:
Sopapo (S) = Masa (m) x Velocidad (v). Así pues:
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Haciendo caso omiso del dolor, los alaridos y los insultos que desencadena el sopapo, tenemos una fórmula para averiguar la magnitud de S, usando como datos el peso aproximado de su pierna y la velocidad probable del pie a la hora de chocar con la pata de la cama: Dado el hecho de que el pie está pegado a la pierna, y que esta actúa como una palanca (Yo qué sé de qué género) que proyecta en forma de movimiento la energía química del cuerpo, y que la pierna a su vez es dirigida por el cerebro (El cerebro del homo sapiens sapiens es muy superior a los del resto de especies existentes) a través de nervios que llevan impulsos eléctricos con precisión, no debería haber entonces razón alguna para el choque, pero como este se da, ni modo… Si la pierna tiene de masa unos ocho kilogramos, y esta impulsa al pie cual kamikaze a una velocidad sorprendente (A esa hora de la mañana) de 3.6 m/s, podemos averiguar la magnitud de S multiplicando ambas cantidades entre sí, entonces se supone, porque yo no estoy seguro, que obtendremos como resultado una magnitud medida en newton, si no es que era en julios…
Para el resultado: S = 28,8 N (Sino entonces era n, o J, o tal vez en j). En fin, ¡que sopapo! Después de la recuperación usted va al baño, donde entre otras cosas, usted se baña. En el baño es donde sin querer uno comprende el verdadero valor de la fricción, pues a la hora de agarrar el jabón, este siempre tiende a saltar de nuestras manos debido sus propiedades. También es en el baño donde se llega a comprender el valor de recoger inmediatamente el jabón a la hora en que este cae al piso: un resbalón es fulminante (Recuerde que S= m x v). También se dan manifestaciones relacionadas con las de las leyes de los fluidos y la hidrostática, pero como de esto no sé nada no se mencionará.
Conforme avanza el día suceden otras cosas como las relacionadas con la gravedad terrestre: la cuita de pájaro que le cayó en la cabeza, la lluvia que lo agarró sin paraguas, etcétera. También suceden cosas relacionadas con inercia, como cuando en una avenida el conductor que viene pasándose el semáforo en rojo pisa el freno, pero sigue derecho hasta arrancarle el parachoques frontal y parte de la carrocería lateral izquierda a su auto, o cuando en un apuro usted lanza algo sobre la mesa en un ángulo de cuarenta y cinco grados hacia abajo según su línea de visión y este algo no se detiene si no es hasta caer al piso (Se recomienda no lanzar nada frágil por esta razón). Entre otras situaciones físicas, las relacionadas con la presión atmosférica son de las más desesperantes, por ejemplo cuando se viaja en automóvil desde una parte alta a una más baja, y debido a la presión usted siente que se le tapan los oídos, y es en ese momento en el que hace un número de muecas directamente proporcional al número de años de su bisabuela multiplicados entre tres para terminar con la sensación desagradable de los oídos tapados. Por supuesto nadie habla de estas cosas.
No quería mencionar el tema del calor porque tampoco sé nada de este tema, pero como es parte de la investigación, no se puede dejar de lado. Como no sé nada del calor ni de termodinámica, solo sé decir que el nivel de calor que se sienta es proporcional a la cantidad de veces que se diga le frase “tengo calor”.
Y por desgracia el estudio termina aquí, porque a “Sujeto A” lo atropelló un camión mientras cruzaba la calle para encontrar más información acerca de la física atómica, astronómica y cuántica. La magnitud de S fue tal que “sujeto A” se dispersó uniformemente por la autopista en un rango de treinta y siete metros a la redonda, esto sin contar los varios kilogramos de materia humana que se impregnaron en el camión, en los vehículos cercanos y en los transeúntes que estaban tirando ojo. Fatal manifestación de la física.
Luego se supo que “Sujeto A” venía resolviendo este problema mientras cruzaba la autopista y por eso no vio, ni oyó el camión que venía: Si un anciano, digno del mejor geriátrico, escupe una flema multicolor formando un ángulo con la horizontal de 3 x pi x radio del cilindro cónico de un sorbete de helado estándar, calcular el tiempo en segundos que tarda el viejo de la par en tirarle un zapato por cochino. Si el gargajo posee forma de prisma y lo atraviesa un rayo de luz blanca, calcular la dispersión monocromática de la frecuencia del color azul-papaya. Si el vejete es diabético, calcular la circunferencia del moretón dejado por el zapatazo, sabiendo que el otro viejo es osteoporótico y no ha desayunado, y que los huevos están a ¢950 el kilo.
Entre las cosas que se lograron descubrir con la importante ayuda del difunto “Sujeto A” se encuentra un postulado de una ley ya descubierta anteriormente que plantea la trayectoria probable de las partículas sólidas o semisólidas que viajan libres por el aire y que oscilan en tamaño los 0.5 mm. Esta dice lo siguiente: “Una partícula que se desplace buscará inmediatamente el ojo más cercano”. “Sujeto A” descubrió también ciertas leyes de termodinámica gatuna, pero se supo que en la confusión del accidente estas fueron robadas por un indigente de la zona y posteriormente utilizadas como papel higiénico por este, y otros seis indigentes más, por lo que las notas fueron irrecuperables.
No es por alarmar a nadie ni nada, pero sabemos quién fue el indigente que robó los apuntes tan preciados… ¡Prepárate, cabrón!
Conclusiones del análisis a.m., y por consiguiente p.m.: El estudio de la física y sus propiedades conlleva peligros que se manifiestan en el momento en que más daños pueden ocasionar (Referirse a S= m x v). Debido a lo anterior nos han atropellado al “Sujeto A”, y además personas inocentes se han visto muy afectadas de una u otra forma.
Es por eso que no debemos detener nuestros mortales pero beneficiosos estudios de las ciencias exactas, pues de lo contrario todos estos sacrificios humanos habrán sido en vano.
Dedicatoria a “Sujeto A”:
Hermano anónimo de sangre mestiza,
no pongas atención a la gente
que pretende de ti hacer risa,
y disfruta el viaje al reino celeste.
Desinteresado colaborador,
en nuestra mente vivirá.
La gente dirá en tu memoria
que, aún en tu invierno, nunca desististe.
Ahora, “Sujeto A”, ve hacia la gloria;
¡Vete “Sujeto A”, que nadie más te mencionará!
Gracias infinitas, “Sujeto A”.
Y así acaba el primer informe del afamado Dr. Weissmann. Aún falta mucho por venir, así que esperad pacientes las próximas entregas de los Ensayos Didácticos Sobre Ciencias Exactas, E.D.S.C.E.
CHAO PS
Weissmann- Mensajes : 10
Fecha de inscripción : 08/01/2010
Edad : 35
Localización : En medio de las tetas de la vida.
Re: Proyecto E.D.S.C.E.!
Esa era, sigo esperando la siguiente entrega del EDSCE yo =D
Adrián- Admin
- Mensajes : 65
Fecha de inscripción : 08/01/2010
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